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¿Cuántas placas Microbit hacen falta en un aula?
Recibo esta pregunta recurrentemente, sobre todo si hay alguna comunidad autónoma que recibe una partida presupuestaria para elegir la dotación de sus centros para tecnología o robótica.
Recordemos que una placa Microbit tiene un coste de poco más de 20€, un precio ridículo si lo comparamos con los ordenadores de inicios del siglo 21 (para saber por qué no escribo números romanos es aquí).
En aquella época Seymour Papert intentaba conseguir que cada estudiante de 7º y 8º grado en el estado de Maine tuviera a su disposición un ordenador, pero lo que más se recuerda es que cuando algún burócrata le preguntaba sorprendido si de verdad creía que cada niño de Maine necesitaba un ordenador lo que Papert respondía era: «No, cada niño de Maine necesita dos ordenadores«.
Cuando alguien plantea que varios niños compartan una placa Microbit me viene a la mente esta anécdota de Papert y mi respuesta es que cada alumno debería disponer de una placa Microbit si es el material que hemos escogido, porque si les digo que cada niño debería contar con varias placas no me van a tomar en serio.
Recuerda que aquí puedes leer las notas de este episodio, pero el artículo completo lo puedes escuchar en el reproductor de audio de arriba o en tu podcatcher preferido.
Las matemáticas no engañan
La media de gasto en libros de texto por estudiante de 1º de la ESO es de 270€. No me resisto a compartir una página de un libro de texto publicada en redes con tantos errores que parece que lo hayan hecho adrede.
Un kit de robótica con piezas de construcción de inyección en plástico oscila entre los 100€ y los 500€.
Una placa Microbit cuesta unos 20€ (sigue buscando si no la encuentras a este precio o pregunta en nuestra comunidad). Una placa de expansión básica para Microbit entre 5€ y 10€. Servos básicos 2€ por unidad. Tira o anillo de 8 LEDs tipo Neopixel 2,50€.
Creo que la opción ganadora en comparación de relación calidad / valor educativo / precio entre un libro de texto, un kit de robótica y un kit básico con Microbit es clara.
Compartir material para fomentar el trabajo en equipo
Algunas personas justifican compartir materiales en el aula porque «se fomenta el trabajo en equipo». Entonces yo hago un ejercicio de memoria y repaso mentalmente mis años como programador de instalaciones automáticas desde que empecé siendo parte del equipo hasta que era yo el que dirigía esos equipos… recuerdo compartir espacios, pero ninguna herramienta a no ser que fuera especializada, cara y que usáramos relativamente poco.
Sinceramente pienso que el concepto de equipo de trabajo que se fomenta en los colegios es muy diferente a lo que yo he vivido a nivel profesional.
Cada estudiante con una placa Microbit de uso individual puede contribuir con su aportación personal participando de un proyecto común mayor en el que estén involucrados otros compañeros.
¿Más de una placa Microbit por niño?
Me acuerdo bien de la frustración de no tener el color adecuado para dibujar cuando era pequeño, por eso nuestro mayor tesoro era un buen set de lápices de colores e intentar no perder ninguno.
Tener una o varias placas Microbit es como dibujar con un solo lápiz negro o con todo un set de lápices de colores. Pasar de no tener nada a tener un lápiz es un enorme salto para poder dibujar, qué duda cabe, pero hay más posibilidades conforme vamos añadiendo colores.
En el curso de domótica con Microbit vemos la diferencia entre un sistema centralizado, uno descentralizado y uno distribuido. Claro, necesitamos varias placas Microbit dependiendo del sistema que queramos representar.
Alguien puede decir que es un buen ejemplo para que se compartan las placas del grupo y que no hace falta que un único estudiante tenga acceso a varias placas, pero yo sigo viendo un estuche de lápices de colores compartidos entre toda la clase.
Dos o más placas Microbit por estudiante permitiría explorar la capacidad de compartir datos entre placas a través de la comunicación por radio mediante la experimentación individual, por ejemplo. El ejemplo más sencillo es utilizar una placa como mando a distancia y otra como algún tipo de robot o vehículo. Lo mismo para recopilar datos desde placas aisladas aprovechando la conexión en serie con el ordenador de una única placa Microbit.
En el audio explico un ejemplo de un alumno que quería mejorar un proyecto de indicadores de dirección o intermitentes con Microbit para cuando va en patinete eléctrico.
¿Queremos trabajar por parejas? Incluso en grupos de varios alumnos es bueno que tengan más placas que miembros del equipo. Perfectamente una pareja puede necesitar diez placas Microbit si su proyecto lo requiere.
Si utilizamos las placas Mirobit en un sistema de aprendizaje basado en proyectos es de vital importancia permitir que los proyectos de los estudiantes permanezcan intactos o como un trabajo en curso durante varias semanas o incluso todo un curso escolar. El coste de los materiales ya no obliga a desmontar los proyectos cada 50 minutos, antes de que llegue la siguiente clase ni hace falta que todos los niños de un curso trabajen en el mismo proyecto para que no haya que desmontarlo.
El coste/beneficio de nuestra propia educación
Supongo que tienes la imagen de impresoras 3D cogiendo polvo en algunos centros escolares a la espera de que alguien las sepa utilizar o reparar, ¿verdad? Sin embargo, es más difícil, por no decir imposible, encontrar esa situación en una academia de extraescolares. La diferencia es que los propietarios de las academias saben que se benefician de la relación coste/beneficio de su propia educación o la de sus empleados y la administración pública parece que no.
La mejor manera de ahorrar en cualquier centro educativo, ya sea un colegio o una academia de extraescolares, es la formación para poder sacar el máximo partido a los entornos de programación, placas de desarrollo o kits de robótica educativa.
Adquirir soluciones completas que prometen todo el contenido curricular y que un docente puede ofrecer a sus alumnos prácticamente sin saber de la materia es pan para hoy y hambre para mañana. De hecho, en el caso de una academia de extraescolares es una decisión que provoca inevitablemente el fracaso del negocio.
Formarte adecuadamente es lo que de verdad te va a hacer ahorrar dinero y esfuerzos, en eso es en lo que ayudamos en Juegos Robótica.
Dani S.
Vídeo extraído de un artículo de la web The Daily Papert con Seymour Papert en plena «campaña» para que cada niño tuviera un ordenador en el año 2000: